I
Al llegar las pruebas la gente puede ser débil, puede surgir negatividad.
Les puede faltar claridad sobre la voluntad de Dios
o el mejor camino para practicar.
Pero debes tener fe en la obra de Dios, como Job,
quien fue débil y maldijo el día en que nació,
pero no negó que Dios da todas las cosas y que también las quita.
Cualquier refinamiento que sufras por las palabras de Dios,
lo que Dios perfecciona es tu fe.
Cuando no lo puedes tocar y cuando no lo puedes ver,
ahí es cuando se exige tu fe.
II
Se necesita fe cuando algo no se puede ver.
Cuando está oculto a simple vista,
cuando no puedes soltar tus propias ideas,
cuando no conoces la obra de Dios, ¡ten fe!
En tiempos difíciles, la fe del hombre debe surgir.
Al refinarse, su fe debe sobresalir.
Sólo la fe te hará ver a Dios y permitirá que Dios te perfeccione.
Cualquier refinamiento que sufras por las palabras de Dios,
lo que Dios perfecciona es tu fe.
Cuando no lo puedes tocar y cuando no lo puedes ver,
ahí es cuando se exige tu fe.
Cualquier refinamiento que sufras por las palabras de Dios,
lo que Dios perfecciona es tu fe.
Cuando no lo puedes tocar y cuando no lo puedes ver,
ahí es cuando se exige tu fe.
Ahí es cuando se exige tu fe.
Sí, ahí es cuando se exige tu fe.
De “Seguir al Cordero y cantar nuevos cánticos”