Las palabras del Señor Jesús nos dan una revelación importante. No todos los que oran en el nombre de Dios pertenecen a Dios. Sólo aquellos que escuchan con humildad las palabras de Dios son el pueblo escogido de Dios que verdaderamente sigue a Dios. Sus corazones están conectados con Dios, por eso pueden escuchar las palabras de Dios y conocer la voz de Dios. Aquellos que no pertenecen a Dios no pueden entender las palabras de Dios, se niegan a escucharlas, e incluso odiarlas. Así como cuando el Señor Jesús vino a hacer la obra de la redención, los discípulos y apóstoles que lo siguieron pudieron escuchar Sus palabras del Señor con humildad, descubrieron la verdad y la vida en ésas palabras y reconocieron que el Señor Jesús era el Mesías venidero y el Cristo, aceptaron seguirlo y al final recibieron la salvación del Señor. Miramos a los principales sacerdotes judíos, a los escribas, a los fariseos y al pueblo judío que seguía a los fariseos, no buscaban escuchar las palabras del Señor, aunque algunos de ellos oyeron las palabras del Señor Jesús, no fueron capaces de reconocer la voz de Dios. Resistieron y condenaron las palabras y la obra del Señor, aunque tales personas también creían en Dios, no escuchaban las palabras de Dios, por ende no eran el pueblo de Dios, eran personas condenadas y eliminadas por Dios. A través de las enseñanzas del Señor Jesús y estos ejemplos, también podemos examinar si somos pueblo de Dios. La profecía del Señor Jesús así dice: “Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis soportar. Pero cuando Él, el Espíritu de verdad, venga, os guiará a toda la verdad” (Juan 16:12-13). De aquí podemos ver que el Señor Jesús hablará nuevamente cuando regrese para guiar a la gente a entrar toda la verdad. Así que, cuando escuchamos a alguien testificar que el Señor ha regresado y ha expresado todas las verdades para la salvación de la humanidad, ¿deberíamos prestar atención a escucharlas para poder reconocer la voz de Dios y seguir al Señor, o deberíamos negarnos a escucharlas? Esto puede revelar completamente si somos el pueblo de Dios o no. Evidentemente, la clave para saber si somos el pueblo de Dios y si podemos recibir al Señor es si somos capaces de buscar y escuchar humildemente las palabras del Señor retornado, y si podemos reconocer la voz de Dios. Así como dicen las palabras de Dios: “Ya que estamos buscando las huellas de Dios, nos corresponde a nosotros buscar la voluntad de Dios, Sus palabras y declaraciones; porque dondequiera que haya nuevas palabras dichas por Dios, allí está la voz de Dios, y donde están las huellas de Dios, ahí están Sus hechos. Donde está la expresión de Dios, ahí aparece, y donde aparece, ahí existe la verdad, el camino y la vida. Al buscar las huellas de Dios, habéis ignorado las palabras “Dios es la verdad, el camino y la vida”. Y así, muchas personas, incluso cuando reciben la verdad, no creen que hayan encontrado las huellas de Dios y mucho menos reconocen la aparición de Dios. ¡Qué error tan grave!”.

Si deseas buscar escuchar las palabras del Señor regresado para poder convertirte en una persona que pertenece a Dios y recibir al Señor lo antes posible, contáctenos a través de la ventana de chat en línea en la parte inferior del sitio web. Te compartiremos las palabras de Dios y te comunicaremos en línea.

Oración de hoy:

Amado Dios, venimos ante ti humildemente, deseando ser tu pueblo que está dispuesto a escuchar Tus palabras. Sabemos que escuchar Tus palabras es crucial para convertirnos en pueblo de Dios y acoger el regreso del Señor. Que toques nuestros corazones, abras nuestros oídos espirituales para saber escuchar Tus palabras. Que nos guíes a reconocer Tu voz para que podamos dar la bienvenida a Tu regreso lo antes posible en esta era oscura y malvada, y vivir en Tu luz para siempre. ¡Amén!