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¿Por qué deben orar, reunirse y leer la palabra de Dios para alcanzar la nueva vida, las personas que creen en Dios?

La respuesta de la palabra de Dios:

La oración es una de las formas en las que el hombre coopera con Dios, es un modo por medio del cual el hombre invoca a Dios y es el proceso por medio del cual el Espíritu de Dios toca al hombre. Se puede decir que los que están sin oración son muertos que no tienen espíritu, lo que prueba que les hacen falta las facultades para que Dios los toque. Sin la oración, no pueden alcanzar una vida espiritual normal, mucho menos pueden seguir la obra del Espíritu Santo; sin la oración, rompen su relación con Dios y no pueden recibir la aprobación de Dios. Siendo que eres alguien que cree en Dios, entre más ores, más te toca Dios. Esas personas tienen una mayor determinación y pueden recibir más la iluminación más reciente de Dios; como resultado, el Espíritu Santo puede perfeccionar sólo a personas como estas tan pronto como sea posible.

de ‘Acerca de la práctica de la oración’ en “La Palabra manifestada en carne”

El propósito de la oración es que las personas puedan venir a la presencia de Dios y recibir las cosas que Él pretende darles. Si oras y vienes a la presencia de Dios con frecuencia, tendrás una relación continua con Él, y Él siempre te conmoverá, siempre recibirás Sus provisiones; y por tanto, serás transformado, tus condiciones mejorarán siempre y no retrocederán. Sobre todo, cuando los hermanos y las hermanas se unen en oración. Cuando la oración ha terminado, hay una cantidad de energía excepcionalmente grande, el rostro de todos está lleno de sudor y sienten que ganan muchas cosas. De hecho, después de algunos días de estar juntos no habían comunicado mucho; fue la oración la que estimuló su energía, y desean poder abandonar al mismo tiempo a sus familias y al mundo, desean poder renunciar a todo, excepto a Dios. Ves lo grande que es su energía. ¡El Espíritu Santo obra para dar este poder a las personas y estas nunca lo disfrutan hasta saciarse! Si no confías en este poder, y endureces tu corazón y te obcecas; o si confías en tu propia fuerza de voluntad y tus aspiraciones, ¿dónde puedes ir? No llegarás lejos antes de tropezar y caer ni tendrás ese poder cuando te vayas. Las personas deben mantener el contacto con Dios de principio a fin, sin embargo, se desprenden de Él durante el camino. Dios es Dios, las personas son las personas, y van por caminos independientes. Dios pronuncia Su palabra y las personas caminan por sus propias sendas; son dos caminos independientes. Cuando las personas no tienen poder, pueden venir a Dios y decir algunas palabras para tomar prestado algo de poder. Después de hacerlo, huyen. Tras correr durante algún tiempo, se les acaban las fuerzas, y vuelven a Dios y le piden un poco más de fuerza. Las personas son así y no pueden mantenerse por mucho tiempo. Cuando las personas dejan a Dios, ya no tienen camino.

[…] Las personas no leen la palabra de Dios y nunca conectan con las cosas de la vida espiritual. No conocen sus propias condiciones. Sin orar y sin la vida de iglesia, es imposible comprender la condición de la vida espiritual. ¿Os sentís así? Para creer en Dios, es necesario orar así. Sin orar, no tienes la imagen de creer en Dios.

de ‘El sentido y la práctica de la oración’ en “Registros de las pláticas de Cristo

Aunque Yo pueda haber acabado de transmitir Mi palabra, las personas no comprenden aún del todo, y esto se debe a que carecen de calibre. Este problema se puede resolver a través de la vida de la Iglesia y de la comunión los unos con los otros.

de ‘La práctica (1)’ en “La Palabra manifestada en carne”

Al ver que Dios siempre está hablando, algunos llegan a sentirse cansados de Sus palabras y piensan que no tiene ninguna consecuencia leer o no Sus palabras. Eso no es un estado normal. […] Así que tienes que comer y beber la palabra de Dios sea cual sea la situación, sea que estés ocupado o no, sea que las circunstancias te sean adversas o no, y sea que estés siendo probado o no. Dentro de todo, la palabra de Dios es el fundamento de la existencia del hombre. Nadie puede alejarse de Su palabra y debe comer de Su palabra como si fueran las tres comidas del día. ¿Podría ser un asunto tan simple el ser perfeccionado y ganado por Dios? Bien sea que comprendas o no en el presente, o si has percibido algo referente a la obra de Dios, debes comer y beber más la palabra de Dios. Esto es entrar de una manera proactiva. Después de leer la palabra de Dios, apresúrate en poner en práctica aquello en lo que puedas entrar, y deja a un lado momentáneamente lo que no puedas. […] Todos aquellos que no dan ninguna importancia a la palabra de Dios y siempre tienen otra actitud hacia Su palabra, una de descuido y la creencia de que no hace ninguna diferencia si leen o no Su palabra, son aquellos que no tienen realidad. Ni la obra del Espíritu Santo, ni Su esclarecimiento pueden ser percibidos en ellos. Tales personas meramente caminan de un lado para otro, y son impostores sin verdaderas cualificaciones, como el señor Nanguo de la parábola.[a]

[…]

Puesto que tú crees en Dios, debes comer y beber Su palabra, experimentar Su palabra, y vivir Su palabra. ¡Sólo esto es creer en Dios! Si dices que crees en Dios, mas no eres capaz de expresar ninguna de Sus palabras ni ponerlas en práctica, no eres considerado un creyente en Dios. Esto es “buscar pan para saciar el hambre”. Hablar únicamente de testimonios triviales, asuntos inútiles, y cuestiones superficiales, y no tener ni siquiera un mínimo de realidad, no constituye creencia en Dios. Por ende,[b] no has captado la manera correcta de creer en Dios. ¿Por qué debes comer y beber más las palabras de Dios? ¿Se considera creencia si no comes ni bebes Sus palabras y sólo buscas ascender al cielo? ¿Cuál es el primer paso para el que cree en Dios? ¿Por cuál camino Dios perfecciona al hombre? ¿Puedes ser perfeccionado sin comer ni beber la palabra de Dios? ¿Puedes ser considerado el pueblo del reino sin que la palabra de Dios sea tu realidad? ¿Qué significa exactamente creer en Dios? Los creyentes en Dios deberían estar poseídos externamente de buena conducta, por lo menos, y es de suma importancia tener la palabra de Dios. No importa lo que suceda, nunca se puede dar la espalda a Su palabra. Tu conocimiento de Dios y el cumplimiento de Su voluntad se logran cabalmente a través de Su palabra. En el futuro, cada nación, denominación, religión y sector será conquistado a través de la palabra. Dios hablará directamente, y toda la gente sostendrá la palabra de Dios en sus manos; por medio de esto las personas serán perfeccionadas. La palabra de Dios lo impregna todo: la gente habla de la palabra de Dios y practica de acuerdo a la palabra de Dios, mientras que guardada dentro sigue estando la palabra de Dios. Tanto por dentro como por fuera, están inmersos en la palabra de Dios, y así son perfeccionados. Aquellos que cumplen la voluntad de Dios y son capaces de ser Sus testigos, son los que tienen la palabra de Dios como realidad.

Entrando en la Era de la Palabra, es decir, en la Era del Reino Milenario, es la obra que se está completando actualmente. A partir de ahora, practicad la comunión en torno a la palabra de Dios. Sólo a través de comer y beber Su palabra, y de experimentarla, podrás exhibir la palabra de Dios. Sólo a través de tus palabras de experiencia podrás convencer a otros. Si no tienes la palabra de Dios, ¡no podrás convencer a nadie! Todos los que son usados por Dios son capaces de hablar la palabra de Dios. Si no puedes, ello es señal de que el Espíritu Santo no ha obrado dentro de ti, y que no has sido perfeccionado. Esta es la importancia de la palabra de Dios. ¿Tienes un corazón sediento de la palabra de Dios? Los que tienen sed de la palabra de Dios están sedientos por la verdad, y sólo tales hombres son bendecidos por Dios. En el futuro, hay muchas más palabras que Dios dirá a todas las religiones y todas las denominaciones. Él, primero habla y pronuncia Su voz en medio de vosotros, y os completa, antes de pasar a hablar y expresar Su voz a los gentiles y conquistarlos. A través de la palabra, todos serán sincera y totalmente convencidos. A través de la palabra de Dios y de Sus revelaciones, el carácter corrupto del hombre ha disminuido. Todos tienen la apariencia del hombre, y el carácter rebelde del hombre también ha disminuido. La palabra obra con autoridad sobre el hombre, y conquista al hombre dentro de la luz de Dios. La obra que Dios llevará a cabo en la era actual, así como los momentos decisivos de Su obra, todo puede encontrarse dentro de Su palabra. Si no lees Su palabra, no entenderás nada. Por medio de tu propio comer y beber Su palabra, comunicando con hermanos y hermanas, y por medio de tus experiencias reales, tu conocimiento de la palabra de Dios llegará a ser completo. Sólo así podrás verdaderamente vivirla en la realidad.

de ‘La Era del Reino es la Era de la Palabra’ en “La Palabra manifestada en carne”

La verdad que el hombre necesita poseer se encuentra en la palabra de Dios, una verdad que es la más beneficiosa y útil para la humanidad. Es el tónico y el sustento que vuestro cuerpo necesita, algo que ayuda a restaurar la humanidad normal, una verdad con la que uno debería equiparse. Cuanto más practiquéis la palabra de Dios, con mayor rapidez florecerá vuestra vida; cuanto más practiquéis la palabra de Dios, más se aclarará la verdad. Conforme crezcáis en estatura, veréis las cosas del mundo espiritual con mayor claridad y seréis más poderosos para triunfar sobre Satanás. […] Por tanto, se puede ir a cualquier sitio con la verdad; pero si no hay verdad en ti, no pienses siquiera en intentar convencer a personas religiosas y menos aún a tu familia. Sin la verdad, serás como la nieve que cae; pero con ella, puedes ser feliz y libre, donde nadie puede atacarte. Por muy fuerte que sea una teoría, no puede superar a la verdad. Con la verdad, el mundo mismo puede tambalearse y moverse los mares, mientras que la ausencia de verdad conduce a la descomposición mediante gusanos; esto es un hecho.

de ‘Practicad la verdad una vez que la entendáis’ en “La Palabra manifestada en carne”

Notas al pie:
a. El texto original omite “de la parábola”.
b. El texto original omite “Por ende”.

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Evangelio de hoy – ¿Cómo conocer a Dios?

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