La fe viene del oír, pero muchas personas ignoran este punto cuando se trata de dar la bienvenida a la venida del Señor y, como resultado, aún no han recibido al Señor. Si deseas darle la bienvenida al Señor y asistir al banquete con Él lo antes posible, lee este artículo, tus buenos deseos tendrán la oportunidad de hacerse realidad.

“Así que la fe viene del oír, y el oír, por la palabra de Cristo” (Romanos 10:17). Este versículo enfatiza la naturaleza fundamental de la fe. La fe no surge de la nada, ni puede ser producida por nosotros mismos, sino que viene del oír, viene de las palabras de Dios o transmitida por el predicador. Sólo escuchando las palabras podemos distinguir entre el camino verdadero y falso, y si es obra o palabra de Dios o no. Por lo tanto, escuchar sermones es crucial para que creamos en Dios y aceptemos Su salvación. Por ejemplo, cuando el Señor Jesús vino a obrar hace dos mil años, quienes lo seguían buscaron y escucharon Sus sermones con una mente abierta, descubrieron que las palabras del Señor tenían autoridad y poder, y todos eran verdad, eran la voz de Dios, por lo tanto siguieron al Señor Jesús y obtuvieron Su salvación. Sin embargo, aquellos fariseos no solo se resistieron y condenaron al Señor Jesús, diciendo que las palabras y la obra del Señor Jesús no eran el verdadero camino, también hicieron todo lo posible para confundir e impedir que los creyentes judíos siguieran al Señor Jesús e impidieran que escucharan los sermones del Señor Jesús. Aquellos creyentes judíos que estaban confundidos y sin discernimiento escucharon ciegamente las palabras de los fariseos y no escucharon las palabras del Señor Jesús, siguieron a ellos y clavaron al Señor Jesús en la cruz, como resultado, cometieron un crimen atroz, y todo el pueblo judío se vio sometido al dolor sin precedentes de la aniquilación de su nación. Sus experiencias también dan una advertencia a nosotros, las personas de los últimos días, porque nos enfrentamos al regreso del Señor en los últimos días. Si podemos o no recibir al Señor y recibir la salvación de Dios en los últimos días depende más de si podemos buscar, investigar y escuchar la voz de Dios. El Señor Jesús dice: “Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco y me siguen” (Juan 10:27). “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo” (Apocalipsis 3:20). “Pero a medianoche se oyó un clamor: ‘¡Aquí está el novio! Salid a recibirlo’” (Mateo 25:6). Cuando escuchan a alguien gritar “Aquí viene el novio”, es decir, cuando escuchan a alguien testificar que el Señor ha regresado, esas vírgenes prudentes (las ovejas de Dios) pueden buscar, investigar y escuchar de manera proactiva la voz de Dios. Una vez que reconozcan la voz de Dios a través de las palabras del Señor, lo aceptarán de inmediato. Entonces, son los que reciben al Señor y asisten al banquete con Él. Se ve que buscar e investigar con humildad y prestar atención a escuchar la voz de Dios es la única manera de seguir los pasos de Dios y acoger al Señor. Tal como las palabras de Dios dicen: “Estamos buscando las huellas de Dios. No estamos buscando figuras espirituales, ni mucho menos estamos buscando figuras de renombre; estamos buscando las huellas de Dios. Por esta razón, ya que estamos buscando las huellas de Dios, nos corresponde a nosotros buscar la voluntad de Dios, Sus palabras y declaraciones; porque dondequiera que haya nuevas palabras dichas por Dios, allí está la voz de Dios, y donde están las huellas de Dios, ahí están Sus hechos. Donde está la expresión de Dios, ahí aparece, y donde aparece, ahí existe la verdad, el camino y la vida. Al buscar las huellas de Dios, habéis ignorado las palabras “Dios es la verdad, el camino y la vida”. Y así, muchas personas, incluso cuando reciben la verdad, no creen que hayan encontrado las huellas de Dios y mucho menos reconocen la aparición de Dios. ¡Qué error tan grave! ” “Dondequiera que Dios aparece, allí se expresa la verdad y estará la voz de Dios. Solo los que pueden aceptar la verdad podrán escuchar la voz de Dios y solo tales personas son aptas para presenciar la aparición de Dios. […] ¡Así que busquemos la voluntad de Dios y descubramos Su aparición en Sus declaraciones, y mantengamos el ritmo de Sus pasos! Dios es la verdad, el camino y la vida. Sus palabras y Su aparición existen simultáneamente y Su carácter y Sus huellas siempre están abiertos en todo momento a la humanidad. Queridos hermanos y hermanas, espero que podáis ver la aparición de Dios en estas palabras, que comencéis a seguir Sus huellas a medida que avanzáis a largas zancadas hacia una nueva era ¡y entráis en el cielo y la tierra nuevos y hermosos que Dios ha preparado para los que esperan Su aparición!”

Hoy en día, ha llegado el gran desastre y las profecías del regreso del Señor básicamente se han cumplido. En este momento crítico para dar la bienvenida al regreso del Señor, si estás dispuesto a escuchar la voz de Dios y darle la bienvenida, contáctanos a través de la ventana de chat en la parte inferior del sitio web, compartiremos las palabras del Señor retornado contigo para que puedas realizar tu hermoso deseo lo antes posible: darle la bienvenida al Señor y asistir al banquete con Él.